Las frutas, al igual que las verduras, son alimentos que no deben faltar en una dieta saludable, pues su consumo ayuda a prevenir diversas enfermedades como las cardiopatías, el cáncer, la diabetes y la obesidad. La Organización Mundial de la Salud recomienda consumir por lo menos 400 gramos diarios para obtener sus beneficios nutricionales.
Es conocida por su capacidad para contribuir a la pérdida de peso y reducir la resistencia a la insulina.
Además de contener grasas saludables, el aguacate está cargado de potasio, fibra y magnesio.
Son ricos en fibra, vitamina C, vitamina K y manganeso, además de tener altos niveles de antioxidantes.
Los antioxidantes de las manzanas pueden promover la salud del corazón y reducir el riesgo de diabetes tipo 2, cáncer y Alzheimer.
En comparación con otras frutas, las fresas tienen un índice glucémico relativamente bajo, por ello no generan mayor afectación en el azúcar.
Son particularmente útiles para promover la salud del corazón debido a su potencial para reducir los lípidos en la sangre y la presión arterial.
El consumo de licopeno está relacionado con un menor riesgo de desarrollar cánceres del sistema digestivo, mientras que la cucurbitacina E puede inhibir el crecimiento de tumores.
Reduce la inflamación y el envejecimiento de las arterias.
Contienen pectina, que puede mejorar el control del azúcar en la sangre y la salud digestiva.
Se ha demostrado que sus antioxidantes protegen las células del daño oxidativo, lo que indica que pueden ayudar a reducir el riesgo de enfermedades crónicas.